Mi experiencia fue probablemente lo mejor que me ha pasado. Me divertí muchísimo participando en todas las actividades que los organizadores habían previsto, todo desde el rafting hasta el taller de paella fue estupendo. Lo único malo del campamento fue la duración ya que solo duro una semana. Le recomendaría la experiencia a todo el mundo que quiera conocer jóvenes celiacos y comer un montón de cosas sin gluten.

 

Jernej Zupancic, Slovenia

 

 

“¡Supercalifragilisticoespialidoso!” No hay mejores palabras que la usada por Mary Poppins para describir la fantásticamente singular semana pasada en Alicante. He tenido la gran suerte de poder disfrutar, junto con mi hermana, de un campamento internacional con un programa completo y variado; y también, de formar parte de un grupo amigable, divertido y cuanto menos sensacionalmente variopinto. Así pues, con una sonrisa de oreja a oreja (que no deje de lucir en, me gustaría dar las gracias al increíble equipo organizador, a FACE Joven, a CYE… y en especial, a María Van Der Hofstadt, porque sin ninguno de ellos esto no hubiese sido posible. ¡Gracias! 😀

 

Ana Prats, España

 

 

La primera vez que leí sobre los Summer Camps de CYE fue hace dos años pero todavía era muy joven para poder participar, pero este año cuando vi que el campamento iba a organizarse en España me di cuenta de que ya tenía edad suficiente para poder participar y disfrutar esta experiencia. Cuando este invierno se abrieron las inscripciones no dude en apuntarme y me hizo mucha ilusión cuando recibí el e-mail que decía que me habían aceptado, me hacía muchísima ilusión conocer a la gente, el programa y los paisajes de la zona.

Cuando llegué al aeropuerto de Alicante uno de los organizadores estaba esperándome en la puerta, en el alojamiento podíamos disfrutar de la piscina y el gimnasio en los ratos de tiempo libre, no había tiempo para el aburrimiento con todas las cosas que podíamos ver y hacer. La excursión que más me gustó fue la del Rafting, lo pasamos muy bien. En general durante todo el campamento la atmosfera era perfecta a pesar del calor, disfrutamos de la naturaleza, paisajes espectaculares como las vistas desde el Peñón de Ifach en Calpe. Disfruté de las palmeras y el olor a mar, además tuve la oportunidad de poder probar todo tipo de comida tradicional, había estado en España antes pero nunca había probado tantas cosas típicas con la tranquilidad de que fuesen sin gluten. A pesar de ser la única participante Ucraniana sentí que la nacionalidad no era importante aquí, todos compartimos la misma enfermedad y eso nos convertía en un gran grupo. Antes de venir no había pensado que esta experiencia me daría la oportunidad de hacer tantos buenos amigos, creo que es una experiencia que nadie se debería perder. Ha sido una semana inolvidable entre amigos de todo el mundo, se notaba el gran esfuerzo realizado por parte del equipo organizador para que todo fuese perfecto. ¡¡GRACIAS!!

 

Dorottya Komlósi, Hungary

 

 

Esta experiencia fue realmente la primera para mí, en muchos sentidos. ¿Probar croquetas por primera vez? Hecho. ¿Cocinar paella por primera? Hecho. ¿Compartir tapas sin preocupaciones por primera vez? Hecho. Además de estas experiencias culinarias, este viaje fue también el primero en el que por primera vez pasé unos días junto a otros celíacos. Y me di cuenta de que cuando conocemos a estas personas, procedentes de todo el mundo, con diferentes culturas, orígenes y en diferentes etapas de nuestra vida, inmediatamente nos sentimos atraídos por este gran vínculo de entendimiento mutuo.

 

La sensación de alivio y respiro que provoca pasar una semana con otros celíacos no debe subestimarse. Volví con la sensación de que soy parte de una comunidad internacional que ni siquiera sabía que existía. Y volví después de haber hecho un grupo impresionante, de comprensión, de amigos con los que he creado brillantes recuerdos acompañados de mucha comida sin gluten.

 

Sarah Wheldon, Reino Unido

 

Éste ha sido mi segundo año en un summercamp de CYE, y si hay algo que he aprendido es que cada año es completamente diferente, pero todos son increíbles y este año Alicante no ha sido una excepción. Una vez en casa te das cuenta de lo que realmente hace especial el summercamp es la gente con la que te encuentras y compartes momentos inolvidables. Durante una semana hemos hecho muchas actividades, desde rafting por el Segura hasta un concurso de paellas al más puro estilo Masterchef !

 

Eduard Colomer, España

 

Todavía estoy intentando superar la depresión post campamento. Volver a la realidad puede ser difícil, especialmente después de una semana de actividades llenas de diversión, gente increíble y deliciosa comida. Fue un placer conocer a los nuevos participantes y reunirse con viejos amigos, ponerse al día y compartir risas, recuerdos mientras creábamos nuevos.

 

Además de todos los nuevos recuerdos que creamos durante esa semana, la característica más especial del campamento, en mi opinión, fue la organización y el equipo detrás de ella. Realmente se podía sentir la energía y el amor que había en la creación del campamento. Era evidente que el equipo había pasado horas, días, meses y años dedicando sus vidas a asegurarse de que todo saliera bien. Una mejora fresca y nueva este año fue la App; CampApp: olvídate de contar, pasar lista, preguntarte dónde están tus amigos, o qué era lo siguiente en el calendario. Con nuestros códigos QR en nuestras acreditaciones, los organizadores pudieron escanearnos en las comidas y en el autobús, lo que nos permitió más tiempo para hacer cosas divertidas en lugar de preocuparnos por dónde estaban las personas. Cada día era único y lleno de diversión sin parar.

 

¿Mi parte favorita de la semana?  Nuestra fiesta especial. No mucha gente puede decir que han estado en un castillo por la noche. Incluso menos pueden decir que han estado en una fiesta privada en un castillo por la noche.  Ahora añade celiacos en la mezcla. Casi con toda seguridad, un Celiaco sabe que  no podría comer casi nada en un cóctel. Pero… gracias a este increíble equipo, pudimos. Nuestro grupo puede decir que disfrutamos de una noche con amigos,  bailando en la cima de un castillo, con vistas impresionantes, bebidas refrescantes y deliciosa comida sin gluten. Nunca olvidaré esa noche.

Entonces, ¿por qué el campamento es tan especial? Es un lugar donde puedes estar despreocupado, porque por una vez, todo se puede comer. Por una vez, no hay que preocuparse por la próxima vez que vas a comer o de si encontrarás una opción libre de gluten o no. Por una vez, puedes disfrutar con tus amigos de un churro sin gluten en lugar de ver como los disfrutan ellos. Por unos días, puedes estar a gusto y centrarse en divertirse en lugar de preocuparse por qué comer. ¿Había algo malo en el campamento? Sólo una cosa: que tenía que terminar y siempre nos quedamos con ganas de más.

 

Allie Scheiber, Estados Unidos

 

Como delegado paquistaní  asistí a la Asamblea General 2016 de AOECS, donde supe que el próximo campamento de verano de CYE sería en España. Entonces decidí ser parte de este evento. Las actualizaciones sobre el mismo durante todo el año fueron emocionantes y el sitio web profesional y amable así como la retroalimentación por parte del equipo organizador daba vibraciones positivas sobre la semana que habían planeado. Tenía pleno apoyo por su parte para cada consulta y pregunta que realizaba para poder ser parte del evento.

 

La semana ha sido una de las más memorables de mi vida. Desde el aterrizaje en Alicante a mi vuelta, cada hora fue utilizada para una experiencia sin gluten española. El equipo organizador ha superado las expectativas y trabajado muy duro para que todos nosotros disfrutáramos la experiencia. Aunque CYE agrupa a los jóvenes europeos, mi presencia junto a la de las delegadas australianas y estadounidenses convirtieron al grupo y al evento en internacional.

 

Ha sido mi primera vez en España, pero probablemente no será la última. Estoy enganchado a la hospitalidad española y la cultura amistosa. Fue mi primera experiencia de Rafting, kayak en el mar Mediterráneo, visitar una isla (Tabarca) y el hermoso pueblo de Altea. La visita de día y noche al Castillo de Santa Bárbara fue un toque encantador sobre la ciudad de Alicante y su historia.

 

Hablar del campamento de verano estaría incompleto sin comentar la razón por la que estuvimos allí; los alimentos sin gluten. En una palabra, ¡impresionante! La comida desde el primer al último día en este campamento de verano era sabrosa, un montón de variedad, cantidad, planeado y lleno de cuidado y amor por parte del equipo para atender no sólo a los celiacos, también diferentes necesidades mencionadas con anterioridad por los participantes. Esta atención al detalle lo hizo más memorable.

 

¡Aprovecho esta oportunidad para agradecer al equipo por acogernos a todos y brindarnos la oportunidad de hacer nuevos amigos, tener una semana turística llena de golosinas sin gluten!

 

Sultan Yousaf, Pakistán

 

 

Estoy muy contenta de haber tenido la posibilidad de participar en el Campamento de Verano CYE de este año en Alicante, España, del 24 al 31 de julio. Fue mi segundo campamento de verano de CYE y tengo que confirmar que es una experiencia maravillosa si quieres conocer gente nueva o reunirse de nuevo con viejos amigos; Visitar nuevos lugares y probar nuevas actividades, obviamente disfrutando de deliciosa comida sin gluten con celíacos jóvenes.

 

Éramos un grupo de 56 jóvenes celíacos entre 18 y 30 años provenientes de 18 lugares diferentes, no sólo europeos como Italia, Chipre, Holanda, Finlandia, Reino Unido, etc., sino también de Australia, Pakistán y Estados Unidos. Con un horario lleno de actividades, en sólo una semana pudimos combinar momentos inolvidables: visitas culturales de castillos, museos y viejos pueblos; Fiestas en una discoteca o una noche en el Castillo de Alicante; Aventuras increíbles como snorkeling, rafting y kayak o hacer senderismo en un parque natural y hasta un taller de Paella. Todo maridado con la degustación de comida española tradicional y gente maravillosa. Además, durante el tiempo libre podíamos disfrutar de la piscina de la residencia universitaria donde estábamos alojados y de las grandes playas de la Costa Blanca. Realmente espero poder unirme a los próximos campamentos de verano y por supuesto agradezco a los organizadores que lograron hacer todo posible.

 

Luana Giberti, Italia

 

 

Ser diagnosticado como un celíaco trae consigo un montón de dudas durante la vida cotidiana. A veces, cuando la comida entra en la imagen siempre hay una parte de nosotros que empieza a hacer todas esas preguntas relacionadas con los alimentos que estamos acostumbrados a realizar. ¿Qué pasa si aun siendo celíaco no surgen todas estas dudas? Esto es lo que son los CYE Summer Camps! Tener una semana llena de diversión sin preocuparse por la comida que estás comiendo, al tiempo que conoces a gente nueva con la que compartes la misma condición.

 

El campamento de verano de este año no decepcionó. Tuvimos una semana completa de actividades y de poco dormir. Fue genial hacer cosas como rafting, senderismo, visitas culturales, búsqueda de tesoros (¡¡Equipo Posidonia!!), aprender a cocinar paella (¡¡grupo 3 – 90/91!!), fiestas, probar la comida tradicional y comer, comer, comer. Fue genial para mí reencontrarme con viejos amigos y hacer nuevos en el camino. Una de las mejores cosas fue las actividades de team building que ayudaron a que el grupo de 67 participantes, monitores incluidos, de todo el mundo se conociesen.

 

¡El final del campamento siempre deja un sabor agridulce, pero hay que pensar que nos queda el campamento del año que viene para volvernos a encontrar!

 

¡Gracias por los recuerdos CYE Summer Camp Alicante 2017!

 

Daniel Grima, Malta

 

 

Hay momentos en los que «Europa» no es sólo una expresión geográfica o algo que se oye en las noticias hablando de política. Incluso en su pequeña dimensión, el campamento de verano de CYE es un ejemplo perfecto que muestra cuán hermoso puede ser reunir a jóvenes de todas partes de nuestro continente. Es una experiencia que te da la oportunidad para ponerte en contacto con otras culturas, realidades y que realmente te enriquece mucho.

 

 Para que todo esto fuese posible, necesitamos agradecer a dos grupos de personas. En primer lugar, el equipo español que organizó el campamento de verano e hizo un trabajo extraordinario, logrando llevar a más de sesenta personas durante una semana entera. Y en segundo lugar no podemos olvidar a los jóvenes celíacos de Europa que inventaron el campamento de verano y han mantenido la iniciativa viva durante dieciocho años a través de diferentes generaciones.

 

Este campamento de verano es una experiencia que no voy a olvidar, desde el mar azul profundo del Mediterráneo hasta las tardes, cuando se podía oír a la gente hablando en diez idiomas diferentes. Estoy ansioso por el futuro, ya que estoy seguro de que tendremos la oportunidad de vivir muchas más experiencias hermosas juntos.

 

Luca Pocher, Italy